Los UROS son nativos del Lago Titicaca, el lago más alto del mundo. Dicen que antaño fue parte del océano y que ahora sólo queda un poco de agua. En las imágenes podéis ver cómo habría sido el océano y que extensión tiene ahora el lago. En este lugar es donde los UROS han logrado aprovechar la totora para construir sus islas artificiales y en ellas sus viviendas.
La totora es una planta con propiedades muy interesantes, las raíces que extiende hacia el suelo forman un entramado que hace posible cortarlas en bloques que tienen la propiedad de flotar como un corcho. Estos bloques son unidos con cuerdas de totora y estacas, propiciando que con el tiempo este entramado vivo una sus raíces formando un solo bloque. La fijación de las islas en el lugar apropiado se realiza también con largas cuerdas de totora y varias anclas para evitar que el viento mueva la isla hacia otros lares. En la actualidad los UROS también aprovechan el plástico, el cual reciclan, lo usan en lugar de la totora en forma de cuerdas que son más resistentes. También lo utilizan como un protector de la parte baja de la isla y de sus caballitos de totora, permitiendo que duren varios meses más. Los bloques de la isla los van renovando de forma permanente, con un eficaz sistema de mantenimiento. La adaptación a la vida moderna le hace utilizar celdas solares para iluminarse en la noche y para calentar el agua y los alimentos. La escuela y la salud han llegado también a ellos en forma de islas, cada isla tiene un nombre y forman la comunidad de los UROS. No le sorprenda amigo turista que canten en diferentes idiomas, aquí les mostramos.
Aliensombra
La totora es una planta con propiedades muy interesantes, las raíces que extiende hacia el suelo forman un entramado que hace posible cortarlas en bloques que tienen la propiedad de flotar como un corcho. Estos bloques son unidos con cuerdas de totora y estacas, propiciando que con el tiempo este entramado vivo una sus raíces formando un solo bloque. La fijación de las islas en el lugar apropiado se realiza también con largas cuerdas de totora y varias anclas para evitar que el viento mueva la isla hacia otros lares. En la actualidad los UROS también aprovechan el plástico, el cual reciclan, lo usan en lugar de la totora en forma de cuerdas que son más resistentes. También lo utilizan como un protector de la parte baja de la isla y de sus caballitos de totora, permitiendo que duren varios meses más. Los bloques de la isla los van renovando de forma permanente, con un eficaz sistema de mantenimiento. La adaptación a la vida moderna le hace utilizar celdas solares para iluminarse en la noche y para calentar el agua y los alimentos. La escuela y la salud han llegado también a ellos en forma de islas, cada isla tiene un nombre y forman la comunidad de los UROS. No le sorprenda amigo turista que canten en diferentes idiomas, aquí les mostramos.
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